NOTICIARIO
35 años de la Reserva Marina de la Isla de
Tabarca
La reserva marina de interés pesquero de
la isla de Tabarca cumplió el pasado abril 35
años de existencia, en los que ha demostrado
que el fomento de la pesca artesanal sosteni-ble
y las medidas de protección del medio
ambiente contribuyen de manera conjunta a
mejorar los recursos pesqueros y hábitats
marinos.
Creada por Orden del 4 de abril de 1986
(BOE núm. 112 del 10 de mayo) por el
Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimenta-ción
(MAPA), a partir de un estudio de la
Universidad de Alicante, la isla de Tabarca
acoge la primera reserva marina de interés
pesquero en España, dando comienzo a una
línea de protección a la pesca artesanal que
ha llevado a la puesta en marcha de otras 11
reservas, que conforman la Red de Reservas
Marinas, creada en el marco de la Ley de
Pesca Marítima del Estado de 2001.
En la actualidad, la Red está compuesta
por 12 espacios (nueve en el Mediterráneo y
tres en Canarias), siendo la reserva de
Dragonera (Mallorca) la última en incorpo-rarse
a la red, en 2020; ofrecen protección a
más de 105.200 hectáreas.
Cinco de estas reservas están gestionadas
en exclusiva por el MAPA, porque se
encuentran en zonas donde solamente hay
aguas exteriores (Masía Blanca, Islas Colum-bretes,
Cabo de Gata-Níjar, Isla de Alborán e
Isla de la Palma), mientras que las otras siete
son de gestión compartida con las comunida-des
autónomas ya que existen aguas exterio-res
e interiores (Levante de Mallorca-Cala
Rajada, Sa Dragonera, Isla de Tabarca, Cabo
de Palos-Islas Hormigas, Cabo Tiñoso, Isla
Graciosa-Islotes del norte de Lanzarote y
Punta de la Restinga-Mar de las Calmas).
La Reserva Marina de la Isla de Tabarca
tiene una extensión de 1.860 hectáreas, frente
a las costas de Santa Pola en la provincia de
Alicante. Incluye aguas exteriores e interio-res,
gestionadas por el MAPA y por la Comu-nidad
Valenciana, respectivamente. El efecto
reserva de este espacio ha permitido incre-mentar
la presencia de juveniles y grandes
tallas de los reproductores, que son la base de
la recuperación de los recursos pesqueros.
Destaca la presencia de meros, salmonetes,
morenas, dentones, pargos y doradas, además
de especies de paso como la seriola. Sus
fondos marinos se encuentran recubiertos por
praderas de la fanerógama marina Posidonia
oceánica, en excelente estado. El oxígeno
producido por esta planta depura y enriquece
las aguas, mientras la cobertura vegetal cons-tituye
un área de cría y refugio para gran
cantidad de larvas y alevines de peces.
En la realización de estas tareas de
protección resulta fundamental la colabora-
2021 1001