de la misma fecha, se le otorgó otra
cruz similar por los diferentes hechos
de armas en los que participó hasta el
final del sitio de Baler.
El día 7 de octubre marchó a Granada
con licencia como repatriado y se incorporó
posteriormente al Regimiento
Soria n.º 9 de guarnición en Sevilla,
pero tuvo que acogerse a dos meses
de licencia para terminar de curar las
secuelas de la enfermedad contraída
en las Filipinas, durante el sitio. Se
presentó a las oposiciones de sanidad
militar y por Real Orden de 18 de septiembre
de 1900 fue nombrado médico
alumno de la Academia de Sanidad
Militar. Fue promovido al empleo
de médico segundo (teniente) el 18 de
junio de 1901 y destinado al Hospital
Militar de Sevilla.
Poco después se trasladó en comisión
de servicios a Tenerife y en marzo
de 1903 fue destinado a Pamplona, al
Regimiento de Infantería de la Constitución
64 / Revista Ejército n.º 972 • abril 2022
n.º 29. En el mes de marzo
de 1904, tuvo que asistir en Madrid
a un acto militar de gran contenido
emotivo para todos y, en especial,
para Vigil: el sepelio definitivo de los
restos de los héroes que murieron en
Baler. El 13 de abril de 1906 ascendió
a oficial médico de primera (capitán) y
fue destinado al Batallón de Cazadores
de Barcelona n.º 3, de guarnición
en Barcelona.
En 1909 tuvo lugar la guerra de Melilla
como consecuencia del ataque
de los rifeños al ferrocarril minero. Su
batallón se embarcó para la ciudad el
14 de julio con los refuerzos de tropas
que el Gobierno dispuso y que darían
lugar, a finales de mes, a las tristes jornadas
de la Semana Trágica de Barcelona.
Nada más llegar a Melilla, se
desplazó con su batallón a la posición
del Zoco Fondak y, el día 18, a la de
Sidi Hamed el Hach, lugar donde se
desarrollaron fuertes combates, en
los que obtuvieron la Cruz Laureada
de San Fernando el comandante Royo
y el capitán Guiloche, siendo destacado
con una compañía al Atalayón. Permaneció
en dicha zona y estuvo en los
combates de los días 20 al 27 de julio,
día triste este último por los sucesos
del barranco del Lobo. Continuó participando
con su unidad en las acciones
que dieron lugar a la ocupación
de Atlanten, Segangan y otros puntos
al sureste de las estribaciones del
Gurugú. Fue una guerra dura contra
un enemigo valeroso en la que la sanidad
militar se distinguió ante el gran
número de bajas que se produjeron.
Ya en aquellos meses y en la misma
zona, actuaba también el médico militar
Gómez Ulla.
Partió de Melilla con su unidad el día
12 de diciembre. Regresó a Barcelona
y el 21 de marzo de 1910 le fue concedida
la Cruz de 1.ª clase del Mérito
Militar con distintivo rojo «por su
comportamiento y méritos contraídos
en las acciones de guerra sostenidas
entre el 21 y el 31 de julio de 1909». El
26 de abril le fue otorgada otra cruz
similar, pero pensionada. En 1910
se casó con doña Purificación Alonso
Ruiz, de cuyo matrimonio nacieron
seis hijos.
Fotografía del médico militar Vigíl de Quiñones
En el mes de marzo
de 1904, tuvo que
asistir en Madrid a un
acto militar de gran
contenido emotivo
para todos y, en
especial, para Vigil:
el sepelio definitivo
de los restos de los
héroes que murieron
en Baler