REVISTA EJÉRCITO
N.º 968 EXTRAORDINARIO NOVIEMBRE
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características balísticas de sus proyectiles:
de plomo y unos cincuenta
gramos de peso, su forma de bicono
o glande le conferían carácter subsónico;
por su pequeño tamaño tampoco
se veían volar y, finalmente, al
impactar, trasmitían toda su energía
sobre el blanco con efectos devastadores:
fracturas y contusiones de
gran entidad. Dicho de otro modo, la
primera noción de estar bajo ataque
de honderos sería ver caer a los compañeros
de fila.
Si en los siglos posteriores la figura
del hondero desparecerá como guerrero,
la honda quedará íntimamente
ligada a Baleares.
EDAD MEDIA
El 31 de diciembre de 1229 el rey
Jaime I entraba en la entonces Medina
Mayurka, completando la reconquista
de Mallorca e incorporándola
a la Corona de Aragón. A su
regreso dejaba un gobernador que
se estableció en el Palacio de La Almudaina,
el mismo que ocupaba el
derrotado valí almohade Abú Yahyá.
Desde entonces y de forma ininterrumpida,
ha habido guarnición
permanente en Baleares, con La Almudaina
—hoy perteneciente a Patrimonio
Nacional— como sede del
mando militar.
A partir de este momento la defensa
insular se basará en la movilización
de los cavalls forçats («lanzas»
de caballería) y las milicias concejiles
(peones a pie), un sistema que
evolucionará para desembocar en
el siglo xvi en la combinación de
unas fuertes milicias comarcales y
una reducida fuerza regular —digamos
profesional— a las órdenes del
virrey.
Bajo esta estructura mixta, y alertados
por un sistema de alarma basado
en torres de vigilancia y puestos
fortificados que jalonaba la costa
(talaies de foc), las fuerzas de defensa
se enfrentaban, entre otros intentos
hostiles, a los piratas berberiscos
que raziaban el litoral español.
FUERZAS DE GUARNICIÓN
DEL EJÉRCITO
REAL BORBÓNICO
El 28 de noviembre de 1715 Felipe V
crea la Capitanía General de Mallorca
e Ibiza —recordemos que Menorca
estaba en poder de los ingleses y
no se recuperó hasta 1782—, antecedente
próximo de la actual Comandancia
General de Baleares.
A la cabeza de la misma puso un capitán
general, que sustituyó al virrey.
En este contexto, es en 1762 cuando
se fundamenta en Baleares una fuerza
de guarnición de mayor enjundia, con
el Regimiento de Milicias Regladas de
Mallorca, conteniendo dos batallones
y destacando una parte de su fuerza
al castillo de Ibiza. Hasta 1808 las Baleares
serán defendidas por estas milicias
provinciales y por regimientos
venidos de fuera en respuesta a una
crisis o para preparar una campaña,
como fue la recuperación de Menorca,
con la División Volante, mandada
por el marqués de la Romana en 1799.
La cualidad mejor del hondero era la de
escaramucear y flanquear moviéndose
ágilmente por cualquier tipo de terreno