des, disponibilidad incondicional,
que sin ellos no hubiese sido posible
mantener el grado de eficacia
y concentración las 24 horas
del día. Es un orgullo constatar la
gran calidad humana del grupo de
hombres y mujeres de las Fuerzas
Armadas y Guardia Civil que con
su esfuerzo demostraron ser dignos
de pertenecer a esta gran nación
que es España conscientes de
que contribuyeron con su trabajo
a la seguridad presente y futura de
todos los españoles.
En resumen, esta misión fue muy
especial por varios aspectos, entre
ellos el ambiente multinacional en
que se desarrollaba, el relevo que
hubo que afrontar y los retos que
fueron surgiendo a los que hubo
que ir dando solución, tanto de
seguridad y aeronáuticos como
de vida y funcionamiento, manteniendo
el aeropuerto operativo
H24, considerado por los afganos
como «la ventana ante el mundo»
por su influencia estratégica y económica.
Todo ello tuvo resultados
excelentes gracias sobre todo a la
sensibilidad que mostró el contingente
para con el pueblo afgano,
lo cual dice mucho del carácter
español.
Para terminar unos versos que reflejan
el compañerismo vivido:
Quiero expresar las gracias
a los hombres y mujeres
que participaron en KAIA
liderando el aeropuerto y…
aquello sobre la marcha.
Ahora me viene al recuerdo
escenas que pasan de largo,
que ancladas en mi mente
expresan lo que pasamos.
Logística…
difícil apuesta,
llevar del sur al norte
el ISAF y todas sus tiendas.
Personal de operaciones
siempre están de servicio
para que el aeropuerto funcione
con precisión de reloj suizo.
Grupo de Mando trabaja
para nada improvisar
y todo esté previsto
así no poder fallar.
En perreras EODs…,
listos para actuar
ante cualquier amenaza
que afecte a la seguridad.
Me queda la inteligencia
con su amenaza a cuestas,
el día que no lo dicen
es cuando más aciertan.
A lo largo de 10 años
a muchos me he encontrado
y siempre se ha comentado
que KAIA nos unió tanto.
Allí surgió la amistad
que es para siempre, hermano,
fruto de la adversidad
y lo mal que lo pasamos.
Pero a pesar de todo
el pabellón quedó muy alto
y a la llegada a la patria
nos estaban esperando
nuestros jefes, nuestros mandos
para agradecernos el trabajo
y también, felicitarnos.
Como nuestras familias
fundidas en un abrazo,
¡qué foto la de aquel día!
y ya han pasado más de 10 años…
revista de aeronáutica y astronáutica / julio-agosto 2020
recuerdos de KAIA 583