Varios
130 Memorial de Caballería, n.º 90 - Diciembre 2020
MISCELÁNEA
SAN MIGUEL Y EL REGIMIENTO LUSITANIA
Jose María Inigo Simal
coronel de Caballería
Cada 29 de septiembre la Brigada Paracaidista recuerda
que San Miguel Arcángel es el Angel Protector
o Custodio de los paracaidistas. La historia bíblica se
refiere a San Miguel como el primero de los siete Arcángeles,
el Príncipe de los Ángeles y Jefe de los Ejércitos de Dios, manifestando su fortaleza y poder al
haber luchado en la gran batalla del cielo, inspirando así valentía a los demás ángeles, y expulsando
de los cielos con su espada de fuego a Satanás y sus seguidores para mayor gloria de Dios.
Históricamente se le representa como un ángel con armadura, con vestimenta de general romano,
amenazando con una lanza o espada a un demonio o un dragón. Por su valentía, audacia e
intrepidez, es considerado en muchos países como patrono y protector de los paracaidistas.
El origen de este patronazgo es curioso y se remonta a 1944, en las operaciones previas al desembarco
en Normandía. Cuando las fuerzas francesas del 1er Regimiento SAS fueron lanzadas sobre
la Bretaña ocupada, y antes del salto, el capellán del regimiento repartió a los paracaidistas una
pequeña medalla de San Miguel. La misión no fue bien, los paracaidistas tuvieron que dispersarse
y acogerse a las partidas de guerrilleros que operaban en la zona. Cuando pasado un tiempo quisieron
reagruparse nuevamente, la medalla de San Miguel fue el santo y seña de reconocimiento entre
los paracaidistas. Con la creación de nuevas unidades paracaidistas, esta seña de identidad, la de
encomendarse a San Miguel para un buen reagrupamiento después del salto, fue tomando adeptos
entre los paracaidistas aliados, llegando a convertirse en el patrón de todos ellos. Con el devenir del
tiempo, muchas de las unidades paracaidistas creadas posteriormente a la 2ª Guerra Mundial tomaron
también el patronazgo del Arcángel. Desde entonces, San Miguel se convirtió en patrón y guía
de los paracaidistas del mundo, por su valentía, audacia
e intrepidez, por ser el jefe de los ángeles que
bajaron del cielo para dominar al mal.
Cuando se estudia la historia del Regimiento
Lusitania, se descubre con sorpresa la especial vinculación
tradicional de esta unidad con el Arcángel
desde sus orígenes. Y resulta que su primer coronel
y fundador, Jaime Miguel de Guzmán, bien sea por
llevar su nombre, bien llevado por alguna circunstancia
personal cuyo origen desconocemos, sentía
gran devoción por San Miguel Arcángel. El 10 de
febrero de 1718 su Regimiento de Dragones de Pozoblanco
pasará a denominarse Lusitania. Y ese
mismo año y a consecuencia del distinguido comportamiento
del Regimiento en la batalla de Melazzo
(Italia), el Rey Felipe V otorgará a los guiones del
Regimiento en su reverso, la imagen de San Miguel,
representada por el monte Egido y el lema QUIT
UT DEUS (Quién como Dios, lema de los ángeles
del cielo). Hoy en día, el guion zarpado histórico que
dispone el regimiento muestra fielmente esta ima-
Anverso y reverso del Guión Histórico gen.