NOTICIARIO
Niveles de los hielos árticos y antárticos a
primeros de 2020
El Centro Nacional de Nieve y Hielo de
los Estados Unidos de América (National
Snow&Ice Data Center, NSIDC) ha dado a
conocer el estado de la extensión de los
hielos árticos y antárticos.
Respecto al Ártico, el hielo marino alcanzó
el pasado 5 de marzo su máxima extensión
anual, cifrada en 15,05 millones de kilómetros
cuadrados. Este máximo de 2020 es el undécimo
más bajo desde que existen los registros
vía satélite (1979), pero el mayor desde 2013.
El mínimo registrado fue en 2017 con 14,41
km2. Por su parte, el 22 de febrero la extensión
medida del hielo marino antártico era de 2,69
millones de km2, lo que supone el mínimo del
verano en el Polo Sur.
En cuanto a la situación antártica, los
datos obtenidos por los científicos españoles
en las bases antárticas corroboran una temperatura
media más cálida de la habitual, con un
valor de 3,5º C, lo que está 1,3º C por encima
de la media en el período 2005-2019. Estos
datos han sido obtenidos en la estación que la
Agencia Estatal de Meteorología española
(AEMET) tiene instalada en la Base Juan
Carlos I de la isla Livingston.
El NSIDC señala que los datos son estimativos
y pendientes del estudio final, y tenía
previsto emitir un anuncio formal en abril con
un análisis completo de las posibles causas de
las condiciones de hielo de este año, aspectos
interesantes de la temporada de crecimiento
del hielo y gráficos comparativos de este año
con la serie conocida.
Avance climático de la campaña antártica
española
Entre los científicos y técnicos destacados
en las bases antárticas españolas (BAE)
Juan Carlos I, en la isla Livingston, y Gabriel
de Castilla, en la Decepción, ha participado
personal de la Agencia Estatal de Meteorología
(AEMET), que como resumen inicial han
constatado que durante el pasado verano
austral las estaciones meteorológicas de las
bases han registrado temperaturas inusualmente
altas.
La media de enero-febrero de 2020 en la
BAE Juan Carlos I ha sido más cálida que en
años anteriores —como se señala en la noticia
anterior—, con una temperatura media de
3,5° C y una anomalía de 1,3° C respecto al
promedio de los últimos 15 años (período de
referencia 2005-2019). Este verano ha quedado
calificado como el segundo más cálido de
la serie, solo superado por el de 2006, con
3,9° C y una anomalía de 1,8° C.
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