Este artículo trata de la
aplicación de los principios de
la sorpresa y la preparación
de golpes de mano en la toma
de fortalezas, en el siglo xii,
al tiempo que las resalta sus
limitaciones. El protagonista
de estas acciones fue Geraldo
Sempavor (sin Miedo), que
llegó a ser un verdadero
experto. También se tratan los
requerimientos para efectuar
una acción de este tipo, no
muy distintos que hoy en día,
pero adecuados al entorno de
la época
José María González Lanzarote
Teniente coronel de Infantería
Geraldo Geráldez, apodado Sempavor,
sin miedo, es uno de los más conocidos
personajes que produjo la cambiante
frontera durante el siglo xiii, en
esta ocasión en la parte portuguesa y
leonesa. Es un personaje de orígenes
oscuros y, comenzando la inevitable
comparativa con el más exitoso de los
guerreros de frontera que aspiraron o
consiguieron hacerse con un señorío,
Relieve en el coro de la Catedral de Evora. Siglo xiv. Representa a Geraldo Sempavor
el Cid, no pertenecía, como este, a
la alta nobleza. Es probable que solo
fuera un caballero que fue hecho prisionero
en alguna aceifa musulmana y
que pasó tiempo como soldado esclavo
en alguna corte o ciudad, hasta que
escapó o decidió marcharse, de ahí
su conocimiento de la idiosincrasia y,
probablemente, el idioma de sus oponentes1.
54 / Revista Ejército n.º 965 • septiembre 2021
Es probable que participara
en la toma temporal de Beja, en 1162,
por lo que quizá estableciera relaciones
con miembros de las milicias concejiles
de las ciudades fronterizas, sobre
todo Santarém.
Probablemente, Geraldo no tuviera,
por excesiva, la idea inicial de hacerse
con un señorío en la zona que es
actualmente Extremadura. El tratado
GERALDO
SEMPAVOR.
LA SORPRESA
Y SUS
LIMITACIONES
EN EL SIGLO XII