ñando mi palabra de que seré el primero que
me presentaré entre los bravos que deben
ejecutarlo».
Está documentado que la máquina
submarina se construyó y se programaron
pruebas de mar para octubre del 1811, pero se
desconoce si finalmente estas se efectuaron y
en su caso los resultados. El gobierno revolucionario
decidió negociar un armisticio el 20
de octubre de 1811 con el virrey Francisco
Javier de Elío, por lo que es probable que las
pruebas previstas se cancelaran y, finalmente,
se abandonara el proyecto. William Taber
moría en 1813, a los 33 años de edad, tras
legar todos sus bienes a la causa de la Independencia.
Del proyecto y del modelo construido
nada se volvió a saber.
25.247.—No tan invencibles
Seis han sido las unidades
que ha tenido la
Armada británica con el
nombre Invincible, curiosamente, cuatro de
ellas terminaron sus días hundidas. El primer
Invincible se hundió poco tiempo después de
comenzar a surcar los mares bajo pabellón
inglés y lo hizo muy cerca de su base al
«comerse» una lengua de arena frente a
Portsmouth. El segundo se hundió en 1801,
con la pérdida de más de 400 hombres. El
tercero no se hundió, pero tuvo una vida activa
cortísima, de 1808 a 1814. El cuarto se
perdió en una gran tormenta. El quinto fue
hundido en la batalla de Jutlandia y arrastró
al fondo a más de 1.000 víctimas. El último,
el portaviones Invincible que participó en la
Guerra de las Malvinas, terminó desgüazado
en Turquía, pero hay muchas dudas sobre los
daños que sufrió por parte de la aviación
argentina, y lo cierto es que su venta a la
Marina australiana, que poco tiempo antes del
comienzo de la guerra había sido apalabrada
—aprobada por el Gobierno australiano y
MISCELÁNEAS
aceptada por el Gobierno británico—, fue
bruscamente cancelada tras las operaciones
en el Atlántico Sur. Podría considerarse que
es un nombre con «mal fario», para los
ingleses.
Álvaro DE AGUSTÍN VÁZQUEZ
Capitán de navío (Reserva)
25.248.—El linaje del gris naval
El Boletín Oficial del
Ministerio de Marina
número sesenta, de fecha
27 de mayo del año 1904, exhortaba a la
uniformidad de pintado para todos los buques
de la Armada mediante Real Orden de generalidad.
Durante su estancia en la Ciudad Condal
S. M. el Rey Alfonso XIII avistó, en el puerto
de Barcelona, una escuadra de buques italianos
fondeados que llamó su atención por el
color que lucían sus cascos y arboladuras. La
iniciativa y nueva empresa sería encargada al
capitán general del Departamento de Cartagena,
quien por orden de S. M. procedió al
cumplimiento de la citada directriz. La División
Naval de Instrucción realizó los ensayos
necesarios para encontrar la mezcla definitiva
de la pintura gris-oscura; igual a la empleada
por la Marina de guerra italiana. Los resultados
de estos ensayos se plasmaron en veinte
planchas de zinc, de un decímetro cuadrado;
sirviendo, estas, de muestras del tono de color
que se habría de declarar reglamentario. Este
modo tan simple supuso la uniformidad en
todos los buques de nuestra Marina de los
cascos, arboladuras y embarcaciones menores
unificando su color, convirtiéndose en el
antecesor del actual gris naval.
Vicente Jesús BERNAL TORTOSA
Brigada (HIS)
2020 1085