188 AGUSTÍN PACHECO FERNÁNDEZ
Pese a la finalización de la Guerra Civil, las obras defensivas continuarían,
y serían acondicionadas y potenciadas durante la II Guerra Mundial.
Las labores fueron organizadas por las unidades de zapadores pertenecientes
al Regimiento de Fortificación n.º 5 y al Regimiento Mixto de Ingenieros
n.º 1086, como mano de obra se emplearon presos concentrados en la alcazaba
de Zeluán, el Batallón de Trabajadores n.º 145 y paisanos reclutados por
la Falange87. Como consecuencia de los desembarcos anglo-americanos en
Orán, enmarcados en la Operación Torch (1942), dichas obras estuvieron en
el punto de mira de los servicios de inteligencia aliados. En este sentido los
militares franceses realizaron un informe, que incluía gráficos y planos, con
las características y situación de las principales obras de fortificación. Una
documentación de carácter secreto que fue proporcionada a los norteamericanos,
quienes la copiaron y tradujeron inmediatamente. Afortunadamente,
se ha podido hallar una copia de ambos informes88.
CONCLUSIONES
La principal reflexión que se extrae de este trabajo es que la posibilidad
de que Francia atacara los territorios españoles del norte de África
durante la Guerra Civil, en particular la zona oriental y la ciudad de Melilla,
existió. Una hipótesis que, al menos, con los documentos aportados parece
probada. De hecho, la astronómica provisión de fondos que se destinó al
«Presupuesto de obras de fortificación en la zona oriental del Protectorado»,
casi 34 millones y medio de pesetas, resulta sintomático. No obstante, que
dicho riesgo influyera en el plan estratégico de Franco para intentar ganar
la contienda y, por tanto, que afectara a las operaciones militares desarrolladas
en la Península, en especial a la abortada ofensiva sobre Cataluña en la
primavera de 1938, ofrece todavía ciertas dudas. En todo caso, es evidente
que, los nuevos datos que ahora ven la luz constituyen una nueva vía de
investigación abierta a ulteriores trabajos.
Por lo que respecta a la similitud entre los fortines construidos en
Nules (Castellón) y el río Muluya (Marruecos), la explicación radica en que
las órdenes de ejecución de ambos emanaron de la Comandancia General
86 Ibídem, p. 35.
87 Archivo General de la Administración (AGA), sig. 81/05132. Expdte. 1. Ordenes Generales
de Operaciones nº 1 y 2, fechadas, respectivamente en Melilla, el 8 y el 22 de
septiembre de 1938
88 Disponibles en: Archives du Service Historique de L ́Armée de Terre (castillo de Vincennes,
París) y National Archives and Records Administration (NARA – EE.UU.).
Revista de Historia Militar, 131 (2022), pp. 188-196. ISSN: 0482-5748