Fig. 12. Vista del submarino SMX-31 de litio propuesto por Naval Group en la Euronaval de
Conclusiones
TEMAS PROFESIONALES
París en 2018. (Fuente: H. I. Sutton).
Los científicos siguen buscando desde hace mucho tiempo la manera de
incrementar la capacidad anaeróbica de los submarinos, bien con propulsión
AIP, nuclear o con innovadoras baterías de gran capacidad que reemplacen a
las clásicas de plomo ácido; es el sueño del hombre desde que Narciso Monturiol
nos planteara el problema de la navegación submarina.
En la actualidad, si se pretende un sumergible no nuclear con 15 o más
días de autonomía en inmersión, que pueda llegar incluso a las tres semanas,
como está demostrando en el AIP del S-80, es necesario disponer de un AIP de
reformado. Este sistema es en el que están trabajando tres de los principales
fabricantes de submarinos —Navantia, TKMS y Naval Group—, si bien solo
Navantia dispone de un proyecto diseñado ex profeso, el S-80, mientras que el
resto son solo desarrollos.
Los datos que tenemos de litio para submarinos, Saft y Hanwha, dibujan una
pila de 100 o 200 Wh/kg, que puede proporcionar entre cuatro y ocho días de
autonomía a velocidades bajas. Además de España, Francia y Alemania —los
máximos exportadores occidentales—, Rusia, empieza a pensar en el litio para
su clase Lada.
El submarino con baterías de litio es ya una realidad, aunque aún esté en
pruebas de prototipo. No tenemos datos de su autonomía y prestaciones,
tampoco si emplea batería de iones de litio, litio-azufre u otra combinación de
materiales que pueda superar los 200 Wh/kg.
2020 47