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302 de la superficie al espacio, nuevos retos en la gestión del espacio aéreo
revista de aeronáutica y astronáutica / abril 2022
usuarios. Vehículos que demandan
un marco regulatorio adecuado, su
integración segura en el espacio aéreo
y la implantación de un sistema
válido de provisión de datos y gestión
automatizada de sus operaciones.
CONCEPTO U-SPACE
El concepto U-space responderá
a esas demandas. Desde las operaciones
de drones más sencillas,
como pueda ser tomar fotos durante
un paseo, hasta las más complejas,
que afecten a nuestros sistemas de
transporte, movilidad en entornos
urbanos de alta densidad, seguridad
ciudadana, etc. Los distintos servicios
de U-space se implantarán progresivamente
en los próximos años
constituyendo un nuevo desafío para
reguladores, proveedores de servicios
de navegación aérea, usuarios,
cuerpos y fuerzas de seguridad de
estado, fuerzas armadas, etc.
Por otra parte, la utilización de las
capas superiores de la atmosfera y
del espacio exterior, cada día más
ocupado, se está abriendo al uso
de nuevas capacidades de vigilancia,
navegación y comunicaciones.
Importantes logros tecnológicos,
unidos al abaratamiento de los costes
en la explotación de las constelaciones,
hace que sea mucho más
asequible su uso en apoyo directa
al mundo de la aviación. La irrupción
de la navegación por satélite
en el ámbito de la aviación, basada
en sistemas de aumentación, tanto
de espacio (EGNOS) como de tierra
(GBAS), proporcionan una clara
ventaja sobre los servicios de navegación
convencionales. La tecnología
aplicada al espacio va a cambiar
conceptos de empleo en el ámbito
de las Fuerzas Armadas en sus misiones
de control del espacio aéreo
y aguas de soberanía nacional, control
de fronteras y flujos, servicios de
búsqueda y rescate, etc. Prueba de
esta transformación es la inclusión
efectiva del concepto aeroespacial
en la doctrina de las Fuerzas Aéreas
de todos los países de nuestro entorno,
empeñados hoy en la implantación
real del poder aeroespacial.
Entornos operativos que hace unos
años parecían lejanos como, por
ejemplo, el control de la navegación
espacial comercial, la utilización de
armamento desde el espacio o la
vigilancia de la basura espacial, son
misiones reales para las que hay
que dotarse, prepararse y cumplir.
Aplicación directa de trasformación
ha sido la puesta en servicio, por
parte del Ejército del Aire, del Centro
de Operaciones de Vigilancia Espacial
(COVE) o el lanzamiento del
programa STARTICAL por parte de
ENAIRE e Indra en el marco del Plan
de Recuperación, Transformación y
Resiliencia del Gobierno de España,
con importantes capacidades de vigilancia
y comunicaciones para vuelos
transoceánicos y en áreas con
déficits de apoyos a la navegación
aérea.
Nos encontramos ante nuevos
usos del y desde un espacio aéreo,
elemento vertebrador del Estado y
sector estratégico de la economía
nacional que, tal es su relevancia,
ha merecido la publicación de una
novedosa Estrategia de Seguridad
Controladores aéreos del Ejército del Aire en el Centro de Control de ENAIRE en Madrid Aeroespacial.