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MMF, un programa OTAN con patente de corso europea 309
del personal, es siempre proporcional
a la contribución económica de
cada nación en el programa, lo que
les puede permitir operar un avión
con una tripulación exclusivamente
nacional, si fuese necesario.
De este modo, cada país puede
utilizar sus horas de vuelo tanto para
realizar misiones nacionales como
internacionales. El programa suma
actualmente un total de 9900 horas
de vuelo anules.
Si dadas las circunstancias no se
pudieran satisfacer simultáneamente
todas las solicitudes de vuelos
recibidas en la MMU, en la base del
programa se define un orden de
priorización.
Así, las misiones fundamentales
son: la respuesta a una emergencia
o crisis nacional y/o la respuesta a
un conflicto armado o a una crisis
en la que esté involucrado un participante,
revista de aeronáutica y astronáutica / abril 2022
el uso de la aeronave como
apoyo nacional a las operaciones
marco de la UE/OTAN/ONU, el apoyo
nacional a una operación humanitaria
y las necesidades nacionales
como el transporte de personal VIP.
Dentro de estas prioridades, las
aeroevacuaciones médicas y el reabastecimiento
en vuelo tendrán
prioridad sobre otras necesidades
de transporte.
Una de las grandes ventajas del
programa MMF es que permite la
venta de horas de vuelo a terceros
países, que pueden realizar el pago
tanto en efectivo como a través del
sistema internacional ATARES (Air
Transport and Air to Air Refueling
Exchange of Services). Este hecho
posibilita no solo la compartición
del costoso peso de este sistema
de armas (burden sharing), sino
también dar acceso a sus capacidades
a todos los países de la OTAN y
de la UE, con gran flexibilidad.
Ejemplo de esta gran ventaja
asociada al MMF es la participación
de la República Checa. Con
una participación económica comparativamente
menor a la de otros
países miembros del programa,
A330 MRTT despega desde Eindoven