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Formación de cuadro «terreno» en el centro y media luna a la izquierda de la imagen, en arrecaballo.es (op.cit.)
F. EL CUADRO TERRENO FUERTE
El cuadro de terreno fuerte era una
formación para casos excepcionales;
se realizaba en aquellos casos en los
que un ejército, normalmente poco
numeroso, se hallase rodeado por tres
de sus lados por un ejército mayor. Es
una formación de «supervivencia» en
la cual el terreno ocupa un papel crucial,
pues en proporción y por poner
un ejemplo, «un ejército de 12 700
picas «cabe a cada uno a 4233 y un
soldado más que llevará el uno; y entre
los escuadrones queda la plaza de
lo que en el campo hay; es en cuadro
de terreno, porque ocupe harta frente,
y salen 42 hileras de a 100 soldados
cada una, y sobran en cada uno en los
dos a 33 y el otro 34 y se guardan las
espaldas el uno al otro»18. Es decir, la
acción de cubrirse las espaldas entre
soldados del mismo ejército aquí
es la que se podría aplicar para ganar
cuanto más terreno al enemigo mejor.
* Como concluye Molina (op. cit.), lo
habitual era que hubiera dos o tres filas
de cuadros dispuestos alternamente,
al estilo de las cohortes romanas,
para cubrirse mutuamente en caso
de que uno de los tercios fuese flanqueado,
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mientras que en los flancos
se dispondría la caballería que daba
cobertura a la infantería y la mantenía
a flote, pues se evitaban así los ataques
a los mismos.
G. LA FORMACIÓN EN MEDIA
LUNA
Esta formación era de difícil realización
a la hora de pelear con las picas.
Eguiluz, en su Discurso y regla militar,
nos muestra un ejemplo: «tiene
8000 picas con que hacerle, y el terreno
ocupa un ruedo de 500 pies, que
es 166 soldados, a 3 pies cada uno de
costado, y con ellos se parten los 8000
soldados, y salen 48 hileras y sobran
32 soldados para las banderas»19. Sin
embargo, con esta formación, el tercio
corría el peligro de que la caballería
enemiga atacase los flancos. En este
caso, según los expertos, el sargento
mayor debería ordenar que entre siete
y nueve soldados de cada hilera del
flanco vuelvan las caras en cada flanco
que esté en peligro20. Si continuamos
con el experto, el alférez Martín
Eguiluz establecía que se debía mediar
el terreno a través de medio pie
geométrico cubico (doce onzas de un
pie). Así, en Tercios Viejos (op. cit.) se
hace hincapié en la figura del sargento
mayor, ya que era quien debía tener en
cuenta la ocupación de las banderas,
tambores, pífanos…, aparte de las hileras
de picas para que en el espacio
no se estorbaran entre ellos. A esto se
ha hecho referencia anteriormente al
mencionar los factores que influyen a
la hora de formar y marchar en una batalla,
entre ellos el terreno, aparte de
las bajas y el enemigo.
También, en cuanto al cuadro se refiere,
hubo otras formaciones que, según
los expertos en la materia, eran
poco provechosas o quedaban obsoletas
según el enemigo a batir o los
efectivos. Seguramente haya muchas
más tácticas y formaciones militares
que nuestros tercios utilizaron cuando
formaban en cuadro, aquí se han
explicado las más comunes.