LA PROBLEMÁTICA DE LOS CUARTELES EN LA AMÉRICA HISPANA 45
La documentación conservada en el Archivo General de Simancas y
en el Archivo General de Indias nos da fe del proceso y las circunstancias
previas a la construcción que resultan interesantísimas; también se conserva
el plano del proyecto del edificio a levantar, con lo que los conocimientos
que con todo ello se pueden obtener quedan perfectamente asentados y son
de verdadero rigor científico.34
Debemos remontarnos al 19 de mayo de 1795, en que el Virrey de
Santa Fe, José de Ezpeleta, dirigió un escrito al Ministro de la Guerra, en
aquel entonces el conde del Campo de Alange, Manuel de Negrete de la
Torre, acompañando un expediente para la construcción de un cuartel para
la tropa veterana y de milicias en Santa Marta.
En el expediente se daba cuenta de las dificultades de acuartelamiento
de aquella tropa, pues antaño ocupaba un edificio por el que la Real Hacienda
pagaba un alquiler, pero que había quedado arruinado. Por ello, y
al no haber posibilidades de alojamiento en la plaza, pasó a acuartelarse en
el claustro del convento de Santo Domingo, edificio construido en el siglo
XVII y que hoy en día es la sede del Instituto de la Cultura y de la Academia
de la Historia de Santa Marta. Sin embargo, pasado un tiempo prudencial,
el obispo reclamó que fuera desocupado el claustro para que volviera a su
función conventual.
Además de esto, el expediente da noticia de otra circunstancia que a
la postre estaría en relación directa con el destino del proyecto del cuartel,
pero que a nuestro juicio tiene aun una mayor importancia sociológica que
vale la pena comentarla. Así, ocurrió que antes de 1772, los soldados de
las compañías fijas de Santa Marta, habían convenido voluntariamente el
que mensualmente se les descontara una cantidad de la paga, sin que en
el documento se especifique cuánto; a esta cantidad la llamaron “Inválido
voluntario”, y su finalidad era la de que fuera destinada para ayudar a los
soldados “cansados y enfermos retirados”, en lo que constituye un inicio de
un sistema de mutualidad verdaderamente interesante que podría ponerse en
relación con las sociedades de socorros mutuos y montepíos que arrancaron
en Inglaterra tras la I Revolución Industrial y que en España tuvieron sus
inicios en el siglo XVIII.35
34 La parte documental de textos es la siguiente: Santa Marta. Construcción de un cuartel,
AGS, SGU,LEG,7243,1. La parte gráfica: Plano de los cuarteles paradorta la tropa
veterana y de milicias de Santa Marta, AGI, MP-PANAMA,304.
35 Sobre este asunto puede consultarse: HERRÁIZ DE MIOTA, César: “Los montepíos
militares del siglo XVIII como origen del sistema de clases pasivas del Estado”, en Revista
del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, nº 56, (2005), pp. 177-208
Revista de Historia Militar, 128 (2020), pp. 45-70. ISSN: 0482-5748