LOS CAZADORES DE VALMASEDA 89
se hizo cargo de una brigada, cuyas fuerzas (batallón León) derrotaron y
dieron muerte al principal caudillo insurrecto (Ignacio Agramonte) en mayo
de 1873. PosteriormenteWeyler, por sus desavenencias con el Ministro de la
Guerra (Nicolás Estévanez) dejó el Caribe el 6 de julio de 187344.
Durante los últimos años del siglo regresó a la isla para hacerse cargo
de la Capitanía en la fase final de la guerra colonial.
Tras la marcha de Weyler el coronel Federico Esponda Morell estuvo
durante medio año al frente de esta columna (noviembre de 1872 a
mayo de 1873). Este militar ya era un veterano combatiente. Había estado
al frente de otras unidades anteriormente en Cuba y en la campaña de Santo
Domingo45.A partir de la primavera de 1872 se redujeron drásticamente los
muertos y heridos en combate, por lo que es posible que su actividad operativa
fuera menor.
Los cazadores de Valmaseda sucumbieron finalmente entre los montes
de San Joaquín y Palo Seco (jurisdicción de Las Tunas) el 2 de diciembre
de 1873. De los hombres que aún mantenía en filas gran parte fueron muertos
a machetazos por las tropas de Máximo Gómez. Fernández del Campo
indica que las fuerzas españolas en esta acción eran 400 hombres del batallón
Valmaseda y 150 guerrilleros. La unidad estaba bajo mando del teniente
coronel José Vilches, acompañándole los comandantes Vicente Martitegui
44 CARDONA, Gabriel, y LOSADA, Juan Carlos: op. cit., pág. 75. Estos autores citan que
el Ministro era antimilitarista. Tal afirmación es muy matizable. Estévanez era un oficial
canario que había ingresado en el Ejército en 1853 y que tuvo una actuación destacada
en la guerra de África (donde obtuvo la laureada). Posteriormente estuvo destinado en
Cuba y poco después abandonó el Ejército con el empleo de comandante en repulsa
por el fusilamiento de los ocho estudiantes de La Habana en noviembre de 1871. Había
estado involucrado en la revolución de 1868, durante la República fue Gobernador de
Madrid, diputado y brevemente Ministro de la Guerra (17 días). Con la Restauración se
exilió a Francia. A principios del siglo XX regresó a España y fue elegido diputado republicano
por Madrid. Con posterioridad regresó a Francia, donde murió en 1914. Durante
la I Guerra Mundial fue partidario de las democracias frente a los imperios centrales.
ESTÉVANEZ, Nicolás: Mis memorias. Madrid, Ediciones Tebas, 1975, pp. 9 y 262.
45 Nació en Madrid el 2 de junio de 1828. Ingreso de cadete en 1839. Gran parte de sus
ascensos fueron por méritos de guerra (grado de comandante en 1863, grado de coronel
en 1870, brigadier en 1871 y mariscal de campo en 1881). Ascendió a teniente general
en 1891. Se le concedieron diversas condecoraciones por acciones de guerra, entre las
que destacan la cruz roja al mérito militar en 1870 y 1877, la de Isabel La Católica en
1871, y la de San Fernando en 1874. También se le otorgó una condecoración especial
en 1881 (solicitada por los jefes y oficiales voluntarios de La Habana) y 1893 (por servicios
especiales). Tras dejar Los Cazadores de Valmaseda pasó a mandar el Regimiento
Cuba. Fue comandante general en Holguín y Las Tunas. En 1876 sele encomendó el
mando de la 2ª división (zona central de la isla), permaneciendo en constantes operaciones
hasta 1878 cuando regresó a la península. Volvió a Cuba en 1883. Falleció el 24 de
diciembre de 1894 en Madrid. Archivo General Militar de Segovia. Sección 1º, legajo
1445E, expediente O. La Correspondencia de España. 26 de enero de 1912, pág. 1. La
Correspondencia Militar. 26 de enero de 1912, pág. 1.
Revista de Historia Militar, 128 (2020), pp. 89-106. ISSN: 0482-5748