LA LEGIÓN EN LAS MISIONES INTERNACIONALES 157
Como consecuencia de esa valerosa acción y en coordinación con el
batallón uruguayo, todo el personal diplomático y la totalidad de los rehenes
pudo ser rescatado sano y salvo y conducido a un lugar seguro. La compañía
permaneció desplegada durante toda la noche, hasta ser relevada, a la mañana
siguiente, por fuerzas de MONUC, pertenecientes al batallón de Ghana.
El capitán Ríos, jefe de la compañía y el teniente Rubio, jefe de la sección
cuyos vehículos recibieron el fuego enemigo, fueron recompensados posteriormente
con sendas cruces al mérito militar con distintivo azul.
El excepcional comportamiento de todos los participantes en la operación
que dio como resultado la liberación del personal que se encontraba
retenido, haciendo gala de una extraordinaria profesionalidad, templanza y
preparación para afrontar una situación tan delicada como la que supuso la
interposición entre los contendientes en una zona de fuego cruzado y la contribución
a la extracción del personal VIP que se encontraba retenido en el
interior de la residencia del Sr. Bemba, se plasmó en el rotundo éxito de una
operación muy difícil, que requirió de una excepcional coordinación sobre
el terreno, circunstancia que sólo fue posible por los lazos culturales, idiomáticos
y de plena sintonía entre el batallón uruguayo y la fuerza española.
El Ministro de Defensa español en aquella época, el Sr. Alonso, afirmó
sobre los hechos:
«Si no hubiera sido por la brillante intervención de los legionarios
españoles, en los graves incidentes del 21 de agosto, se habría producido
allí una chispa que hubiera producido un enfrentamiento muy serio, con
graves consecuencias dentro del país y fuera de él».
Patrulla motorizada por las calles de Kinshasa
Revista de Historia Militar, I extraordinario de 2020, pp. 157-164. ISSN: 0482-5748