![](./pubData/source/images/pages/page179.jpg)
178 JUAN PÉREZ CARRANDI
asedio18. Será el propio desabastecimiento el que termine forzando a los
sitiados a rendir la plaza19 y enviar emisarios para pactar la paz con los
romanos. Estos se avienen a alcanzar un acuerdo si antes se cumplen dos
condiciones ineludibles: que los ecuos entreguen sus armas y luego pasen
bajo el yugo:
ὁ δὲ τοῖς μὲν ἄλλοις Αἰκανοῖς ἔφη σπένδεσθαι καὶ διδόναι τοῖς σώμασι
τὴν ἄδειαν τά τε ὅπλα ἀποθεμένοις καὶ καθ᾽ ἕνα διεξιοῦσιν ὑπὸ ζυγόν20.
Los enemigos han de transitar bajo el yugo provistos de una simple
túnica (nudique omnes)21, naciendo esta práctica, en palabras de Livio, del
deseo romano de deshonrar al enemigo (is ignominiam infensus addidit)22.
Asimismo, se hará a los ecuos entregar la plaza de Corbión a los aliados
tusculanos, manifestando que, prescindiendo de un mayor derramamiento
de sangre2323, los romanos entenderán el paso bajo el yugo como la plena
asunción por parte del enemigo de haber sido sometido y dominado (licere
abire, sed ut exprimatur tandem confessio subactam dominamque esse gentem,
sub iugum abituros)24. En este sentido hemos de señalar que el paso
bajo el yugo nace de una “solicitud” que realiza el vencedor al vencido, y
si bien asistimos a una situación de clara inequidad, de alguna manera se
pretende que la propia fuerza perdedora participe activamente de su derrota,
tornándola más humillante aún al verse obligada a aceptar explícitamente,
no solo su claudicación, sino también su propio sometimiento, escenificado
este de una forma muy gráfica por medio del paso sub iugum. La práctica
se erige en la más alta garantía de sumisión y el yugo vendrá a sustituir al
papel en lo que constituye un deshonroso pseudotratado de rendición. Dionisio
de Halicarnaso habla al respecto de un compromiso adquirido a través
de una estipulación (τοῖς σώμασιν αὐτοῖς ἄδειαν αἰτησαμένους καὶ ζυγὸν
ὑποστάντας)25.
18 Liu. III.23.4: ui numquam eo subiri potuit.
19 Dion. Hal. X.20.7: ἕτεροι δὲ ἐκπολιορκηθέντας ὑπὸ τοῦ Φαβίου καθ᾽ ὁμολογίαν
παραδοῦναι τὸ φρούριον; Ual. Max. II.7.7: quo deuictis Aequiculis; Liu. III.23.4: fames
postremo inde detraxit hostem.
20 Dion. Hal. X.24.6: “Este dijo que iba a firmar un tratado con los demás ecuos y a ofrecer
la inmunidad para sus personas una vez que hubieran depuesto sus armas y pasaran bajo
el yugo de uno en uno”, (Trad. Elvira Jiménez-Ester Sánchez, 1988). En igual sentido,
Ual. Max. II.7.7: sub iugum missis.
21 Liu. III.23.4.
22 Liu. III.28.9.
23 Liu. III.28.9: sanguinis se Aequorum non egere.
24 Liu. III.28.9.
25 Dion. Hal. X.20.7.
Revista de Historia Militar, 129 (2021), pp. 178-196. ISSN: 0482-5748