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TEMAS PROFESIONALES
promueve la imposición del interés turco en el Mediterráneo Oriental emplean-do
dos pivotes adicionales: la contribución a la delimitación de esas aguas a
partir de las costas de la República turca del norte de Chipre (solo reconocida
por la propia Turquía) y los acuerdos a los que se pueda llegar con el Gobier-no
de Trípoli, convertido de facto en un proxy turco.
De hecho, ambas cuestiones están en marcha. Uno de los objetivos de
Turquía es cortar (literalmente) la posibilidad de que el gas natural extraído
de los pozos ubicados en el mar, al sur y al este de Chipre, llegue a Creta y a
la Grecia continental. Viendo un mapa, puede comprobarse que eso podría
generar dificultades similares a las potenciales extracciones egipcias (zona de
Zohr, descubierta en 2015) e israelíes (Tamar y Leviatán, halladas en 2009 y
2010) (9). También levanta suspicacias en Italia (10). Y no digamos en
Chipre, país de la UE que está en medio de este debate, casi como convidado
de piedra, y que también desea dar salida al gas extraído de los yacimientos
ubicados en su propia ZEE (Calipso, Afrodita y Glauco). Como quiera que la
multinacional gala TOTAL es una de las principales implicadas en las pros-pecciones
que se llevan a cabo en los yacimientos chipriotas, en París miran
con creciente recelo las intenciones turcas, lo que ha llevado al Gobierno de
Macron a reforzar su cooperación militar (y sus ventas de armas) con Grecia y
Chipre e incluso a apoyar abiertamente a Haftar, a su vez aliado de Rusia, en
la disputa por Libia.
En esta línea, los acuerdos a los que llegaron Erdoğan y el líder libio Fayez
al-Serraj a finales de 2019 enlazan las ZEE de ambos países y confirman que
Ankara apuesta por una política de máximos. Turquía ha desplegado drones
armados en la Base Aérea de Al-Watiyah para ser empleados contra las tropas
de Haftar (11). Y existe un acuerdo con el Gobierno de Trípoli para convertir
el puerto de Misrata en una base naval turca. Más allá de ello, Turquía mantie-ne
unas magníficas relaciones con Argelia, mientras que Arabia Saudí y los
pero a solamente dos de la costa turca. Ahora bien, Turquía también plantea reivindicaciones de
soberanía sobre algunas de esas islas e islotes que, de hecho, estuvieron a punto de provocar
una guerra con su vecino en 1996.
(9) Lejos quedan los tiempos iniciados con el temprano reconocimiento del Estado de
Israel (1949), la «alianza estratégica» entre ambos auspiciada por los Estados Unidos en plena
Guerra Fría, e incluso de los acuerdos de cooperación entre las industrias de defensa de Israel y
Turquía, suscritos en 1996 y que en su día permitieron la modernización, entre otros equipos,
de los F-4 y los M-60A3 turcos. El incidente de la Flotilla de la Libertad (mayo de 2010), con la
muerte de varios activistas turcos, ha tenido consecuencias duraderas… Las actuales buenas
relaciones de Israel con Marruecos y con el bloque árabe correlacionan con la creciente mala
relación con la neo-otomana Turquía. No son casualidades…
(10) A principios de 2018 un buque que se dirigía a aguas chipriotas para hacer prospeccio-nes
en yacimientos de la zona por cuenta de la multinacional italiana ENI (con autorización del
Gobierno de Chipre) fue interceptado por buques de guerra turcos y obligado a invertir el rumbo.
(11) A su vez, esta base fue bombardeada por aviones Rafale en junio de 2020.
320 Marzo