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LIBROS Y REVISTAS
procedentes del Cuerpo Jurídico Militar a excepción del comandante auditor
Escardó Peinador, que lo era de la Armada. No obstante, y como se pone de
relieve en la obra que comentamos en el capítulo dedicado al joven Cuerpo
Jurídico del Aire, su vida no alcanzó el medio siglo.
En efecto, la Ley 6/1988 creó un nuevo Cuerpo al que inicialmente se
denominó Cuerpo Jurídico Militar de la Defensa y, posteriormente, solo Cuer-po
Jurídico Militar —el que hoy conocemos— que perdió su vinculación con
un ejército concreto y pasó a encuadrarse entre los órganos centrales del
Ministerio de Defensa, en concreto, en la Subsecretaría. La obra que comenta-mos
describe el proceso de creación del nuevo Cuerpo, en el que pasaron a
integrarse todos los oficiales que hasta ese momento integraban los escalafo-nes
de los tres cuerpos pertenecientes a los Ejércitos y la Armada. A pesar de
los intentos de la oposición parlamentaria, la ley tuvo como una de sus carac-terísticas
más llamativas el no permitir que quedaran en escalas a extinguir
aquellos oficiales que no quisieran integrarse en el nuevo Cuerpo (como suele
ser habitual en los casos de importantes cambios legislativos, tal y como se
puso de relieve, sin ir más lejos, con las leyes que regularon el régimen del
personal militar en 1989, 1999 y 2007). La obra que ahora comentamos pone
de manifiesto, en el capítulo dedicado a este cuarto Cuerpo Jurídico, que la
unificación en uno solo de los antiguos Cuerpos de los ejércitos suscitó
la oposición de algunos de sus componentes, sobre todo, entre los de la Arma-da
(cuyo sistema de formación de los opositores aprobados favorecía —a
nuestro juicio— su vinculación con la Marina de Guerra).
La segunda parte de la obra nos parece, si cabe, más interesante que la
primera, pues se trata de un diccionario de juristas militares, en el aparecen
más de quinientas entradas de otros tantos oficiales de los cuatro Cuerpos
antes mencionados, en las que, con brevedad y concisión, se aportan datos
sobre sus carreras militares y civiles. El diccionario abarca desde personajes
nacidos a principios del siglo XIX hasta otros ingresados ya en el actual Cuer-po
Jurídico Militar que han destacado en su profesión o en otras relacionadas
con el ámbito jurídico, político o incluso artístico o deportivo. A título de
ejemplo, entre ellos encontramos a un caballero laureado por una acción de
guerra en 1924 en la campaña de Marruecos (Juan Antonio Ansaldo Bejarano,
teniente auditor del Ejército y piloto militar); dos presidentes del Gobierno
(Manuel García Prieto, marqués de Alhucemas, y Carlos Arias Navarro,
ambos auditores del Ejército); un presidente del Tribunal Constitucional
(Manuel Jiménez de Parga Cabrera, jurídico del Ejército); un académico de la
Lengua (Miguel Sáenz Sagaseta de Ilúrdoz, general auditor del Aire, funcio-nario
de las Naciones Unidas y traductor del inglés y alemán, que ocupa el
sillón «b» de la Real Academia Española), o un presidente del Comité Olímpi-co
Español (Benito Castejón Paz-Pardo, jurídico del Aire). Entre los de la
Armada, que se incluyen en este diccionario biográfico, podemos destacar al
ministro togado Raimundo Fernández-Cuesta Merelo, cofundador de la Falange;
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