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Nombres con historia
Muchos han sido los nombres que han tenido su lugar en
la historia del Atlético del que estamos hablando. De
todos ellos se han elegido unos pocos que han sido historia
tanto el ámbito deportivo como en el de la aviación. Entre to-dos
ellos hemos querido destacar a unos pocos sin olvidar,
por supuesto, a tantos otros que algo han tenido que ver con
las dos instituciones, teniendo en cuenta que en la mayoría
de las ocasiones compaginaban su vida ligada al Ejército del
Aire con sus actividades deportivas. En el caso de los futbo-listas,
además, hemos de recordar que la profesionalización,
en un sentido estrictamente económico, no llegó hasta años
más tarde, ya que las fichas que se pagaban en esos mo-mentos
no permitían a la mayoría de los jugadores permitirse
vivir solo del fútbol.
FRANCISCO VIVES CAMINO
Francisco Vives Camino nació en Alcalá de Hena-res,
Madrid, en 1900. Era hijo del entonces coman-dante
de ingenieros Pedro Vives Vich, ingeniero y
pionero de la aeronáutica militar española, jefe del
Servicio de Aerostación creado en 1896 en Guada-lajara.
Vives Camino realizó el curso de piloto en 1922.
Fue destinado a Tetuán, tomando parte en las ope-raciones
que se estaban llevando a cabo en la gue-rra
en el norte de África que en aquellos momentos
se estaba desarrollando. Posteriormente obtuvo el
título de Piloto Superior de Aeroplano. Ascendió a
capitán de ingenieros y se incorporó al aeródromo
de Melilla, donde se hizo cargo de la Segunda Es-cuadrilla.
Resultó herido en combate en 1925 y tras
una larga recuperación, se incorporó a la Es-cuadrilla
de Breguet XIV, bajo el mando del capitán
Mariano Barberán, en la que formó parte en el des-embarco
de Alhucemas.
Durante la época de los grandes vuelos de la
aviación española, finales de los años veinte prin-cipios
de los treinta, fue testigo de excepción de
estos viajes, participando activamente en la prepa-ración
de alguno de ellos, como el vuelo del «Cua-tro
Vientos», en 1933, cuando desempeñaba el
cargo de Agregado militar en Cuba como capitán.
Durante la tarde del 11 de junio de 1933 el capitán
Vives consiguió de mano del propio capitán Barbe-rán
la famosa carta de navegación utilizada durante
el vuelo.
En 1936 trabajó en Sevilla como ingeniero pa-ra
una empresa, sumándose al movimiento militar
en la base de Tablada. Participará en servicios de
guerra, realizando al mismo tiempo una importante
labor como jefe del Servicio de Combustibles del
Arma Aérea.
El 4 de octubre de 1939 se convirtió, eventual-mente,
en presidente del club de fútbol Athletic
Aviación Club al firmarse la fusión entre los clubes
de fútbol Athletic Club de Madrid y Aviación Na-cional,
aunque fue sustituido en diciembre por el
teniente coronel Luis Navarro Garnica.
Fue nombrado jefe del último grupo español de
Savoia-Marchetti SM.79 en constituirse, el 6-G-28.
Tras la contienda fue nombrado director general de
Infraestructura del Ejército del Aire, ascendiendo a
coronel en 1943.
En 1956 ascendió a general de brigada y en 1964
a teniente general.
Pasó a la reserva en 1966, ayudando a la crea-ción
del Servicio Histórico del Ejército del Aire y co-laborando
activamente con el Instituto de Historia y
Cultura Aeronáuticas.
Durante toda su vida fue un incansable promotor
de cuantas iniciativas condujeron a un desarrollo de
la aviación en todos sus órdenes.
Falleció el 5 de junio de 1997 en Azuqueca de
Henares.
LUIS NAVARRO GARNICA
En 1904 en Pamplona nació Luis Navarro Garni-ca.
En 1919 ingresa como cadete en la Academia
General Militar, finalizada su formación inicial es
destinado a Marruecos durante dos campañas. En
1923 pasa a formar parte de la Aviación ascendien-do
a capitán dos años más tarde.
Tras varios años, en 1941 es nombrado agregado
aéreo en la embajada en Roma. En 1944 vuelve a
España para ser destinado a Logroño y poco des-pués
a Zaragoza. Tras ocupar diversos puestos de
responsabilidad en el ámbito militar ocupa el cargo
de Jefe de Estado Mayor en 1965.
Falleció en Madrid el 31 de marzo de 1995.
Fueron dos los equipos de fútbol que presidiría
Luis Navarro. En 1939, habiéndose producido la
fusión entre el Atlético de Madrid y el Aviación Na-cional
el general Yagüe, entonces ministro del Aire,
le nombró presidente de aquel nuevo club. Bajo su
presidencia, el Atlético logró el primer título de Liga
de toda su historia, en la temporada 1939/40.