Santos-Dumont pionero iberoamericano de la
aviación
A mediados de 1906, Santos-Dumont conocía de primera
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mano las graves carencias que tenían las aeronaves
más ligeras que el aire y sabía que un globo dirigible no
podría competir con un avión para conseguir marcas de
velocidad. Aquel año, ASD dibujó y publicó el esquema de
dos aparatos más pesados que el aire: uno de ellos seme-jaba
un helicóptero actual y el otro era un avión monoplano.
Poco después, se decidió a diseñar y construir su primera
aeronave más pesada que el aire: un aeroplano que llamó
14-bis pues, como se ha mencionado, en una prueba voló
suspendido del dirigible N.º 14. ASD conocía los motores
disponibles en aquel momento y decidió usar un motor An-toinette
V-8 de Léon Levavasseur22, utilizado habitualmente
en lanchas rápidas. Tras esa elección, en agosto de 1906
comenzó a realizar con el nuevo 14-bis pruebas y exhibicio-nes
públicas en las cercanías de París. En la prueba inicial
de vuelo autónomo, comprobó que el motor de 24 CV no
tenía suficiente potencia como ocurrió con los motores de
otros aviones de la primera época. En efecto, los hermanos
Wright usaron en el «Flyer 1» un motor de 12 CV que fue
insuficiente para lograr despegar sin apuros. Por tanto, en
aquellos años uno de los principales problemas a los que
se enfrentaban los diseñadores de aeronaves era encontrar
el motor propulsor adecuado. En el caso de Santos-Du-mont,
como los 24 CV del motor inicial no ofrecían la poten-cia
necesaria para despegar, Levavasseur modificó el motor
para obtener el doble de potencia a 1.500 revoluciones por
minuto. Tras colocar el nuevo motor de 50 CV y reducir 40
kilos el peso en la parte posterior del aeroplano, el 14-bis
estuvo preparado y listo para volar con éxito.
El 23 de octubre de 1906, con el mencionado 14-bis, ASD
ganó el premio Archdeacon por realizar el primer vuelo de
más de 25 metros (voló 60 metros) tras despegar, sin ayuda
externa y con un tren de aterrizaje fijo al aparato. Pocos días
después el 12 de noviembre, ya oscureciendo despegó el
14-bis del campo de Bagatelle y realizó un vuelo de poco
más de 82 metros. Media hora después, en el cuarto intento
Santos-Dumont se elevó a más de 6 metros de altura reco-rriendo
220 metros en 21 segundos a una velocidad media
de 37,4 km/hora. De esa forma, ASD ganó el premio del Aero
Club de Francia para el primer aeroplano que realizase un
vuelo de más de 100 metros. El relato de los miembros del
Aero Club que homologaron el vuelo, describía la emoción
de todos los presentes.
El evento lo merecía: por primera vez en la historia un apa-rato
más pesado que el aire conseguía realizar un vuelo com-pleto,
despegando, volando y tomando tierra sin ningún
apoyo externo. Ferdinand Ferber (1862-1909), capitán del
Ejército francés y notable inventor y pionero en el campo de
la aeronáutica, declaró: «Santos-Dumont avanzó para con-quistar
el aire, paso a paso, salto a salto, vuelo a vuelo»23. En
cualquier caso, la popularidad del pionero brasileño alcanzó
entonces su cota más alta entre los ya numerosos aficiona-dos
al vuelo en Francia, en Brasil y en todo el mundo.
Después de los vuelos del 12 de noviembre de 1906, el
pionero brasileño realizó modificaciones al 14-bis y comenzó
a construir una nueva aeronave denominada N.º 15. El 4 de
abril de 1907 en Saint-Cyr, ASD voló por última vez con el
N.º 14-bis que se precipitó al suelo tras recorrer unos 50 me-tros.
Santos-Dumont sabía que ese aparato no era práctico y
por ello decidió diseñar y probar nuevos modelos. El mencio-nado
N.º 15 era una aeronave de mayor tamaño que la ante-rior,
pero tuvo una corta vida pues cayó a tierra en un
despegue. El modelo N.º 16 fue un dirigible y la N.º 17 un ae-roplano
de grandes dimensiones que fue considerado muy
peligroso para volarlo. El último modelo de esta serie, el N.º
18 era un hidroplano propulsado por una hélice.
El 12 de noviembre 1906, Santos-Dumont con el 14-bis ganó el premio
Archdeacon
El 14-bis apareció en los sellos de muchos países, entre ellos Brasil
Santos-Dumont apareció en este sello de España de 1930