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mental con dos tripulantes y acrobacia superior con un solo
tripulante.
Estaría equipado con un motor ENMASA Beta-4 de
750 CV y hélice de paso variable. El Ministerio del Aire
entregaría a HASA, libres de todo gasto, dos motores
Beta-4 completos y los juegos de herramientas corres-pondientes.
Su velocidad horizontal máxima no debería ser inferior a
400 km/h y su velocidad mínima no debería ser superior a
125 km/h por lo que debería ir equipado con flaps.
El recorrido de despegue superando un obstáculo de 15 m
en campo de hierba no debería ser superior a 680 m. El
recorrido de aterrizaje salvando un obstáculo de 15 m no
debería ser superior a 630 m.
La velocidad ascensional no debería ser inferior a 7,5 m/s
a la altitud de restablecimiento de la potencia. El techo
práctico no sería inferior a 7.000 m. La autonomía no de-bería
ser inferior a 1.200 km.
En los dos puestos de pilotos llevaría tablero estándar de
instrumentos para vuelo en todo tiempo y oxígeno para
ambos. Los mandos estarían duplicados.
Llevaría freno aerodinámico para limitar la velocidad de pi-cado.
Como equipo militar debería incorporar: dos ametra-lladoras
de 12,7 mm fuera de la acción de la hélice;
seis lanzacohetes de instrucción
o cuatro bombas de 50 kg para
instrucción con un solo tripulan-te;
provisiones para el montaje de
un visor de tiro y bombardeo; y
provisiones para instalar una ame-tralladora
fotográfica y máquinas
fotográficas vertical y oblicua con
sus dispositivos de mando.
El Ministerio del Aire entregaría por
su cuenta a HASA el equipo militar
que se ha indicado y un equipo de
VHF con interfono, el equipo sani-tario
de emergencia y el equipo de
oxígeno.
Deberían ser puestos a disposición
del INTA una unidad prototipo en
orden de vuelo; los elementos pre-cisos
para ensayos que como mí-nimo
serían una célula, un fuselaje,
los estabilizadores, bancada y tren;
y una maqueta para ensayos en tú-nel
aerodinámico.
El Ministerio del Aire tendría la pro-piedad
de la licencia de fabricación
del modelo de avión que se con-trataba,
y podría encargar la cons-trucción
del material que decidiera
posteriormente fabricar en serie a
las industrias u organizaciones que
considerara conveniente. Podría
también autorizar a HASA para que
fabricara el material con destino a
su libre venta o ceder la licencia en
las condiciones que en cada caso
se determinaran.
La fecha de punto de partida para
el estudio de revisiones de precios
del contrato sería el 17 de febrero de
1953.
Las condiciones de pago respon-dían
a lo estipulado en el Decreto de
18 de enero de 195219, y serían las
siguientes:
A la firma del contrato, si HASA así lo solicitaba, recibi-ría
a cuenta el 25 % del importe del contrato, es decir,
1.874.969,38 pta.
Una vez aprobada la documentación técnica por el INTA
(memoria, cálculo, planos y resultado de los ensayos pre-vios),
HASA podría percibir a cuenta las cantidades que
solicitara hasta un máximo del 50 % del importe total del
contrato. Ese porcentaje se podría desglosar en las canti-dades
y orden siguientes:
• Un 20 % del importe total del contrato cuando estuvieran
realizados satisfactoriamente los ensayos estáticos pre-ceptivos
en el INTA.
• Un 15 % del importe total del contrato cuando el primer
avión estuviera totalmente terminado y a la vista del certi-ficado
extendido por el jefe de la Zona Territorial de Indus-tria,
ZTI, n.o 2.
• Un 15 % del importe total del contrato cuando, entregada
la documentación técnica, hubiera sido aprobada por el IN-TA
y efectuado el primer vuelo con resultado satisfactorio.
Un último plazo hasta completar el importe total del con-trato
cuando se hubieran realizado satisfactoriamente las
pruebas en el INTA del segundo avión.
Ambas unidades HA-100-E1 debían ser entregadas en
vuelo al Ministerio del Aire –para su inmediato paso al INTA,
encargado de homologar el modelo– antes de que 1953 con-
El primer prototipo HA-100-E1 (XE.12-1) en construcción en la factoría de San Jacinto en agosto
de 1953
El XE.12-1 completamente montado en el interior de la factoría de San Jacinto a mediados de
septiembre de 1953. En ausencia de los neumáticos Pirelli de fabricación española seleccionados para
el avión, se emplearon en el tren unos del HA-1109 de mayor diámetro