EL GENERAL MANUEL FERNÁNDEZ SILVESTRE: ANÁLISIS DE… 387
la Orden de San Fernando, mientras que Silvestre es condecorado con la de
María Cristina y nombrado ayudante de cámara de Alfonso XIII.
Con su destitución, Silvestre podrá comprobar que la fama y el buen
nombre es algo que siempre está en la balanza, ya que marcha de Larache al
tiempo que se inicia una breve campaña de infundios contra él sobre un posible
enriquecimiento durante su etapa allí. Esto se desmonta rápidamente al
demostrar que las compras de terrenos a su nombre se han hecho siguiendo
instrucciones expresas del gobierno y que él no ha obtenido beneficio alguno.
Del Cuarto Militar del rey a la comandancia general de Ceuta
Silvestre regresa a la península, después de ser cesado en Larache,
revestido de éxito, sobre todo, en el ámbito castrense, ya que no falta un
séquito continuo de militares de alta graduación desde su desembarco en
Cádiz hasta su llegada a Madrid. Un entusiasmo secundado por la prensa de
todo signo, que reseña su llegada y que, incluso, provoca momentos ciertamente
surrealistas, como cuando la prensa republicana le dedica alabanzas
al tiempo que critica su nombramiento como ayudante de cámara del rey46.
Su labor de ayudante de cámara del rey, nombramiento que no deja
de ser un premio, a pesar de su cese, es lo que realmente hace que entable
una estrecha relación con Alfonso XIII, la cual hasta el momento no pasaba
de ser la de un militar que despertaba el interés del rey por su popularidad
y con el que despachaba al igual que con el resto del gobierno. El hecho de
acompañar al monarca, cada vez que es designado, tanto en sus actividades
institucionales como sociales y privadas, hace aún mayor la popularidad del
general y más evidente su ascenso social. La prensa que cubre la agenda
del rey reseña siempre la presencia de Silvestre a su lado e, incluso, lo hace
protagonista de chismes como el famoso duelo presuntamente mantenido
con el coronel Francisco Echagüe Santoyo.
En los cuatro años que Silvestre permanece en el Cuarto Militar del
rey verá llegar no solo varias recompensas, sino, también, su ascenso a general
de división, que se le otorga por antigüedad, y la entrada de su hijo, Manuel
Fernández Duarte, en la Academia de Caballería, siguiendo los pasos
de su padre y su abuelo. Por otra parte, a nivel nacional, es la época en que se
crean las Juntas de Defensa, que tanta importancia tendrán en el futuro del
ejército de Marruecos, y en la que el sucesor de Marina en la Alta Comisaría,
el general Gómez Jordana, muere súbitamente en su puesto, lo cual hace
46 Ibídem, pág. 225.
Revista de Historia Militar, I extraordinario de 2021, pp. 387-412. ISSN: 0482-5748