66 EMILIO DE DIEGO GARCÍA
información sobre sus recursos y el empleo de los mismos. El Estado español,
entre 1919 y 1923, era una institución relativamente pequeña, que apenas
controlaba directamente el 10 por 100 del PIB, aunque precisamente la
guerra en Marruecos supusiera establecer diferencias en alguno de aquellos
años con relación a los otros.
El desglose en términos comparativos de los gastos con cargo a los
Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 1919 a 1923, en relación con
las partidas destinadas a los apartados más sensibles en las necesidades sociales
fueron los siguientes:
Presupuestos Generales del Estado (millones de pesetas corrientes)
Años Defensa Sanidad Educación Pensiones Vivienda
1919 606 6 96 102 17
1920 717 5 131 116 13
1921 1.260 7 142 124 13
1922 959 11 151 121 13
1923 852 9 145 129 10
TOTAL 4.394 38 665 592 66
Infraestructuras
Años Ferrocarriles Carreteras Puertos
1919 26 84 34
1920 113 106 42
1921 216 145 48
1922 217 178 108
1923 159 168 77
TOTAL 731 681 309
Una primera estimación daría pie al discurso crítico, pues solo en gastos
militares se habían consumido más de tres veces que en sanidad, educación,
pensiones y vivienda conjuntamente. Pero aún cabrían planteamientos
más llamativos, a caballo entre la realidad y la demagogia. Por ejemplo, si
se utilizara la cifra dedicada a la educación de cada alumno de Instrucción
Primaria, 4’11 pts./año, para compararla con cualquiera de las partidas militares.
O la penuria de los recursos destinados a sanidad, 0’3 pts./h./año.
Solo una información amplia y transparente, dirigida a la legitimar
los gastos del Ministerio de la Guerra podría paliar el efecto de estos datos
Revista de Historia Militar, I extraordinario de 2021, pp. 66-74. ISSN: 0482-5748